Lo asumimos, somos despistados.
1. Notas everywhere. Necesitamos apuntarlo todo, sí, también necesito apuntar que caducan los huevos y los haga para comer. Notas en la nevera, notas en el ordenador, notas en el armario, etc.
2. También virtuales. A los que han pasado del papel y el móvil o el ordenador son más lo suyo. Notas virtuales: correos enviados a ti mismo, notas en el escritorio, alarmas recordatorias... Nada es suficiente.
3. Olvidar planes. "Oh vaya, ¿en serio habíamos quedado?"
4. Comida quemada. Huele a quemado... ¡Mierda, la pizza!
5. Números de teléfono. Menos mal que ya nadie aprende números de teléfono porque cuando había que hacerlo no éramos de os mejores precisamente.
6. Objetos perdidos. Ahí es donde encontrarás todas tus cosas si eres una persona despistada, o probablemente no las encuentres porque alguien se las ha quedado cuando las encontró. Bufandas, paraguas, carpetas, bolígrafos, chaquetas, etc. Y cuando tú te encuentras algo de alguna pobre víctima te lo quedas, por todas aquellas cosas que no recuperaste.
7. Memoria pez. Sí, la capacidad de olvidar lo que te acaban de decir también la tenemos las personas despistadas, en serio te estaba escuchando, simplemente ha pasado volando esa mosca tan interesante y he tenido que admirar cómo se posaba en mi sandwich.
8. Volver a casa. Más de una vez, "¿podemos volver? Se me ha olvidado ________ " (insertar cualquier objeto, porque cualquier cosa se nos puede olvidar, desde el pijama hasta lo que teníamos en la mano antes de salir).
9. ¿De qué estábamos hablando?
Ah sí, cosas que les pasan a las personas despistadas.
10. Fechas. Cumpleaños y aniversarios no son lo nuestro. Incluso cuando te acuerdas, o alguien te lo dice 5 minutos antes, incluso así, llega el momento en el que ves a esa persona y simplemente se te olvida por completo. Es así.