1. Tus amigos o gente de tu edad comienzan a tener hijos.
2. Ves el instituto como unos años muy lejanos.
3. Los niños pequeños te llaman “señor/a”.
4. Ha cambiado tu forma de salir de fiesta.
5. Eres más “exquisito” en la búsqueda de pareja.
6. Te cuidas más.
7. Cuando ves a adolescentes y piensas que tú a su edad no eras así. Y lo mismo sí lo eras pero no te acuerdas.
8. Sabes invertir tu dinero y dejas de ser tan caprichoso.
9. Te has quejado más de una vez de que los dibujos animados de ahora “no son como los de antes”.
10. Empiezas a currarte más las comidas, e incluso descubres que te gusta cocinar.
11. No te disgusta pasar un fin de semana en casa sin salir de fiesta. De hecho, te gusta.
12. Prefieres la calidad a la cantidad, ya sea en alcohol, comida, ropa…
13. Comienzan las bodas de tus primos, amigos y conocidos a los que has visto crecer.
14. Estás más centrado en tu trabajo y/o formación.
No hay duda, te estás haciendo mayor.