8 dramas femeninos del día a día

Que sí, que estos ni son dramas ni nada porque son muy superficiales, pero bien que fastidian.

Suena el despertador y te levantas todo digna para afrontar tu día, hasta que te cruzas con un espejo inesperado y ves que no estás tan mona como te creías recién levantada, que no eres la chica de las películas del pelo alborotado, camiseta y vieja... O sí. Seas quién y cómo seas, seguro que has sufrido uno de estos momentos dramáticos:

1. Ese conjunto que llevabas planeado una semana y que en tu cabeza quedaba tan estupendo, luego resulta no ser así. Que sí, que muy a la moda, que Olivia Palermo llevaba una camiseta igualita y todas esas cosas... Pero no pudo ser un happy ever after, así que, tira de vaqueros.

2. Cuando la cagas con el rimmel. ¿Sabéis cuando tenéis las pestañas perfecta pero decidís daros un toquecito más? Pues eso, que parece que tienes ahí alquitran, que solo te falta un señor mayor mirando el asfaltado...

3. Te pintas las uñas antes dos horas antes de acostarte y... Cuando te levantas llevas el estampado de Disney de tus sábanas en lugar la manicura pertinente.

4. Llevas ocho años viendo una prenda o un par de zapatos que quieres, pero cuando vas a comprarlo, no queda tu talla... Y esa cara, esa cara de la dependienta...

5. O lo que es peor, que solo haya una camiseta/vestido/jersey/lo que sea en la tienda, y que te lo tengas que disputar, siempre sútilmente, con alguien. Todo muy discreto, a base de miradas, de acercamientos sigilosos.

6. Te pintas las uñas, te duchas y se te cascan, ¿por qué?, ¿qué clase de mundo cruel es este?, ¿por qué ese pintauñas que cuesta una pasta no aguanta un lavado?

7. Plancharte el pelo y que llueva. Porque sí, porque ese día que se presentaba árido y soleado tornó a gris, gris oscuro casi negro.

8. Encontrar eso que andabas buscando en Zara y ver que alguien que decidió maquillarse con risketos ese día, se lo probó antes que tú.

Bueno, y hasta aquí hoy (aunque hay muchas más catástrofes). Y que sí, que estos son chorradillas que no son verdaderos dramas, pero que nos molestan. 

Utilizamos cookies para personalizar su experiencia. Si sigue navegando estará aceptando su uso. Más información.