9 cosas que demuestran que estas cerca o has pasado los 25 a la llegada de la Navidad

Con la llegada de las fiestas navideñas los años se hacen notar y conforme avanzas en la década de los 20 años son muchos los cambios que se perciben por estas fechas. El cuerpo nos pide cambiar las costumbres, las cenas navideñas son menos numerosas a la par que aumentan los recuerdos y la carta a los Reyes Magos dejó de ser una obligación hace mucho tiempo. En todo este proceso de metamorfosis, los días que parecían imprescindibles de fiesta en grandes salas se convierten en pequeñas reuniones donde lo importante es la compañía y los reencuentros. Si estás cerca de los 25 o ya has pasado esta maravillosa edad, seguro que alguna vez has reflexionado sobre los siguientes puntos:

1. Es el único momento del año donde podéis reuniros todos los amigos. Los amigos que viven fuera de la ciudad o el país vuelven a cada por navidad y es el único momento del año donde podéis estar todos juntos.

2. Comes menos en la cena de navidad con tal de conservar la línea. Crees que vas a salir rodando de tanta cena de Navidad y controlas más lo que comes para no engordar en estas fechas. Desde cenas de amigos hasta de empresa, antiguos compañeros…. Cualquier motivo te vale para preparar una cena y que te pongan difícil mantener la línea.

3. Cualquier excusa es buena para montar una fiesta. Aunque ya no sientas la misma ilusión por la Navidad, siempre es una buena excusa para estar todo el día fuera de casa sin parar y organizando eventos.

4. Tienes menos regalos, pero son más útiles. Tu carta a los Reyes Magos pasa de usar el verbo “quiero” al “necesito”.

5. Te hace más ilusión dar regalos que recibirlos. Esto sumado a que gastas más dinero en regalos y cuando terminan estas fechas sientes que te has quedado en la ruina.

6. En las cenas familiares, siempre recuerdas las personas que faltan y valoras más las que aún comparten estos momentos contigo. Es inevitable recordar las personas que faltan, pero te das cuenta de la suerte que tienes con los que aún te acompañan.

7. Tus fiestas de Nochevieja han dejado de ser en grandes salas con barras libres y pasan a ser momentos en el centro de la ciudad con los amigos. Ya no estás dispuesto a pagar unos 100 euros por entrar a una discoteca abarrotada con el garrafón como principal protagonista. Ahora lo poco que bebes es de calidad y cuanto menos saturado esté el sitio, mejor.

8. Reflexionas sobre todo lo que ha pasado en el año y te pones nuevos propósitos, pero la diferencia es que ahora sí que los cumples.

9. Ya bebes champán y cava. Aún recuerdas el sabor del fantástico “Champán sin alcohol” pero ahora eres capaz de hacer un buen brindis sin poner cara de asco al beberlo.

Pero pasen los años que pasen, lo importante es aprovechar los grandes momentos que nos brindan estas fechas.