Esta original campaña demuestra que lo que vale mucho, cuesta muy poco
El Principito Antoine de Saint-Exupéry nos lo enseñó desde muy pequeños: no se ve bien sino es con el corazón. Lo esencial es invisible a los ojos.
Una frase que parece que ha seguido Aldi Supermercados con su última campaña #ValeMuchoCuestaPoco que refleja distintas situaciones de nuestro día a día que se solucionan con muy poco dinero en determinados productos. Es más, con mucho menos de lo que esperaríamos gastarnos para solucionarlo.
1. ¿Cuánto cuesta ser un suegro moderno?
Los tiempos cambian, y permanecer en el hype —estar en la onda, para nuestros padres— es algo que cada vez es más complicado. Que si veganos, que si hipsters, que si bloggers... Al final un buen vino despeja cualquier duda de que hay cosas que no tienen por qué cambiar.
2. ¿Cuánto cuesta volver de las vacaciones?
Quizás —y sin el quizás— lo más duro es retomar la rutina. Ahora entendemos a esa gente que sufre el síndrome post-vacacional. ¿Cómo no se va a notar la diferencia de que te llamen porque tu café y sobado está listo a que te llamen cuando estás sobado para que lleves un café?
3. ¿Cuánto cuesta superar una ruptura?
Sí, mucho chocolate, mucho helado y muchas películas de Ryan Gosling. Lo sabemos. Lo sabéis. Y cualquier otro consejo suena más a frase de Horóscopo que a The Idealist. Aquí está la prueba: “hay más peces en el mar”.
4. ¿Cuánto cuesta ser la mejor abuela del mundo?
Eso sí que no cuesta nada de nada, porque todo lo que nos enseñáis vale más que las propinas que nos dais a escondidas de nuestros padres. Gracias por ayudarnos a pasar esta crisis un poco mejor, abuelas del mundo.
