Las 5 grandes mentiras más repetidas de la historia

A lo largo de nuestra vida hemos escuchado (y dicho) mentiras de todo tipo: las piadosas que se dicen para intentar causar un menor daño; las que se dicen para salvar el trasero en una situación inoportuna; las inocentes y luego vienen las grandes mentiras que son tan evidentes que no se conoce aún la razón de por qué se dicen.

1.“No cariño, no te hace gorda”.

Si, no nos cansaremos de preguntaros que tal nos queda ese vestido aunque sepamos que hemos entrado con calzador y aguantando la respiración, sed convincentes con ese “No cariño, no te hace gorda” o sufrid las consecuencias que vendrán después del “¿Me estás diciendo la verdad?”.

2.“No eres tú, soy yo“.

O sus nuevas versiones “Eres demasiado perfect@ para mí”, cuando en realidad quiere decir “Eres tú, que no me acercaba a ti ni con un palo”, ambos sabéis que es mentira pero es más bonito de escuchar.

3.“Esto me duele más a mí que a tí“.

Seguido de un “plas” en toda la cara o todo el culo, a elección del progenitor que llevaba a cabo el castigo pedagógico del guantazo. Pero seamos realistas madres y padres del mundo, por mucho que te pique la mano después del guantazo, quien lo recibe le duele más, seguro.

4.“Mmmm, está muy rico pero no puedo más“.

Si te dicen esto después de haberse llevado a la boca solo dos o tres cucharadas, asúmelo, lo tuyo no es la cocina, deja de intoxicar a tus amigos.

5.“No me engañáis a mí, os engañáis a vosotros“.

No profesores del mundo, nosotros somos conscientes que no hemos estudiado, de que si no nos hemos pasado una hora haciendo nuestro mejor intento de chuleta, a quien intentamos engañar es a vosotros para que nos aprobéis, así que podéis estar tranquilos nosotros no nos engañamos.

¿Qué otra absurda mentira que pese a que sea imposible creer no parais de escuchar?