En épocas de agobios siempre nos aferramos a tiempos mejores, esos en los que nos preocupaba no pisar la línea del teje para no tener que volver a empezar. Hoy en día, lo más normal es ver a los más pequeños con los teléfonos de sus padres en la mano viendo vídeos de la exploradora o de la niña del muñeco de nieve, y la verdad, es que me da un poquito de pena y me pongo nostágica a recordar lo que a mí me hacía feliz por aquellos tiempos:
1. El cuchillo de plástico de colores que regalaban con el queso de untar. Lejos quedaron ya los tiempos en los que nuestros padres no nos dejaban usar cuchillos, pero el primero que cogimos fue el que daban con el pack de Philadelphia, que ni cortaba ni nada, pero nos hacía sentir mayores.
2. El portatazos de Pokemon, que era el objeto que te acercaba más a esa meta llamada Liga Naranja. Nunca sabías cuándo te podías comer un paquete de patatas y recibir a cambio un pokemon legendario...
3. Hacer pinturas picassianas con Paint. Cuánto artista infantil frustrado se forjó gracias a esa aplicación, cuántos Mirós a la papelera de reciclaje.
4. Decorar tu peonza de madera con rotuladores. Esta locura por las peonzas comenzó cuando tu profesor de educación física decidió introducirte en el mundillo. El proceso fue el siguiente: primero le pusiste la monedita de 25 pesetas a la cuerdecita que sirve para lanzar el trompo para hacer lo propio con más soltura, en segundo lugar lo decoraste con rotuladores (tú ya pusiste de moda los estampados tribales) y por último fuiste con ella en el bolsillo a ganarle a todos los niños del barrio y/o de tu clase.
5. Hacer como que sabías hablar en inglés, y reconozcámoslo, sonaba mucho mejor que el idioma auténtico.
6. Ver una película para mayores de 7 años cuando tenías 6, y así estáis ahora... Que sois capaces de cruzar justo por al lado del paso de cebra, quién os ha visto y quién os ve...
7. La serie naranja de El barco de vapor: "Fray Perico y su borrico", "Escenarios fantásticos", "La nariz de Moritz", "Un monstruo en el armario"... Y más tarde ya vendría la serie roja con "Abdel". Eso sí que era literatura de verdad.
8. "¡Por fin es viernes!" de Cartoon Network, o sea, ¿qué más podía pedir un niño? Viernes y los mejores dibujitos del canal... ¡Eso era vida!
Ahora, es tiempo de seguir disfrutando de lo que vaya viniendo.