El decálogo del perfecto compañero de piso

Hablamos de ese animal mitológico que no ha sido visto todavía.

“Compartir piso”, esa sí que es una de esas asignaturas fundamentales que nos deberían de haber enseñado en la Universidad.

Ahora no hagáis como que no sabéis de lo que hablo. Vuestra madre no está delante así que no hace falta que mintáis diciendo que limpiáis el polvo todos los días, que coméis cinco piezas de frutas y verduras y sobre todo, que es lo que más preocupa a una madre, que os abrigáis bien. Todos sabemos lo que hay.

Estás estudiando, llegas a una ciudad nueva y buscas piso en Uniplaces, en menos de 48 horas te contesta el propietario y empieza una nueva aventura.

Piso nuevo vida nueva. Es el momento de conocer a tu compañero de piso y recuerdas (y esperas) que sea como aquella criatura mitológica de la que se habló un día en Cuarto Milenio:  “El Perfecto Compañero de Piso”, un extraño ser que ha sido visto menos veces que el Bigfoot y el Monstruo del lago Ness juntos.

Por favor, si alguna vez sois testigos de un avistamiento de un compañero que cumpla este decálogo, informad al Ministerio de Defensa —pero antes a nosotros, que tenemos una habitación libre—.

Y es que El Perfecto Compañero de Piso cumple siempre con este decálogo:

1. Hace el cuadrante de limpieza de las zonas comunes. Y lo cumple.

Ese cuadrante mágico, con el salón-cocina-baño dividido en distintas semanas. Qué bonito os quedó y que bien queda en la puerta del frigorífico. Para unos compañeros de piso normal ese cuadrante se vuelve invisible, pero para él no. Es su ciclo lunar, se cumple siempre.

2. Compra un 33% de comida más porque sabe que vais a querer coger algo de lo suyo.

El perfecto compañero de piso siempre tendrá avituallamientos básicos para la supervivencia del piso: pizza, huevos, leche y cerveza. Mucha cerveza.

3. Y TIRA EL BRICK DE LECHE.

Parece una bobada, pero… ¿hay algo que de más rabia que ir con toda la ilusión a coger la leche por la mañana para el café y que sólo quede un culín? POR FAVOR. STOP culines de leche en el frigo —voy a abrir un Change–.

4. No es pesetero.

Entiende que la calefacción está para usarla y no pondrá pegas si hay que poner algo más para cubrir los gastos comunes. “Hoy por ti, mañana por mí” aseguran que se le oye decir cuando salen estos temas.

5. Llama antes de abrir las puertas.

Y puestos a inventarnos porcentajes, como en el punto número 2, es de todos sabido que al compartir piso tu intimidad se ve reducida en un 24,63%. Ese momento incómodo en el que alguien abre la puerta y estás en el baño haciéndote un foto sin camiseta para Snapchat o en la habitación con compañía “estudiando” Geografía —y más concretamente las Casas Colgantes—. Pues el Perfecto Compañero de Piso llega, y llama. Sí, llama a la puerta. ¿Increíble, verdad?

6. No te juzga por la música que escuchas de verdad (y no la que dices que te gusta por postureo)

Reconozcámoslo, Mi Gran Noche es un temazo pre-party, pero no queda bien decirlo o publicarlo en las redes sociales. Él no se lo contará a nadie y te cubrirá en la próxima conversación en la que digas que el último mixtape de Drake no es tan bueno como el de 2015.

7. No sólo te pregunta antes de hacer una fiesta, sino que insiste en que traigas a tus amigos y hacer un fiestón.

“Cuantos más mejor”, “Donde caben dos caben tres” y otra serie de refranes para convencerte de que no pasa nada. Que seguro que la gente habla bajito.

8. Cuelga la ropa que te has dejado olvidada en la lavadora.

Eso sí, no va a llegar y planchártela también. Es El Compañero Perfecto de Piso, no el Compañero imbécil.

9. Usa la escobilla del váter y repone el rollo de papel.

​Para algunos ocurre lo mismo que con el cuadrante de la limpieza. Parece que estos dos objetos desaparecen misteriosamente.

10. Podría presentarse a Masterchef si quisiese.

No estamos hablando de que consiga hacer una pizza y palomitas sin que se le quemen, no. Hablamos de que sabe cocinar lentejas, caldos para cuando estás constipado, codido madrileño y lebaniégo y de vez en cuando hace pancakes para desayunar después de haber salido de fiesta.

Ahora con Uniplaces podrás encontrar alojamiento en las mejores ciudades universitarias de Europa. Y recuerda, si aún no te has topado con este compañero perfecto quizás puede ser que sea porque es compañero perfecto eres tú.

Vaya giro de guión, ¿eh?

Uniplaces ofrece un servicio innovador para estudiantes como tú, facilitando la búsqueda y reserva de alojamiento para estudiantes online. Es rápido, seguro y te permite acceder a miles de propiedades de confianza en las mejores ciudades universitarias de Europa.
Utilizamos cookies para personalizar su experiencia. Si sigue navegando estará aceptando su uso. Más información.