5 cosas que suceden cuando terminas la universidad y buscas trabajo

Si te has divertido en la universidad espera a empezar a buscar trabajo.

Si tuviéramos una máquina del tiempo estoy segura de que los que pasamos por la universidad pulsaríamos el botón de rebobinar para volver a disfrutar esos años. Sabemos que no se van a volver a repetir y es la etapa que recordamos con más cariño de lo que llevamos de vida. ¿Estudiar? Sí, pero, ¿salir? TAMBIÉN. Y es que al final resulta verdad el dicho de que: nunca seremos tan jóvenes como ahora. Y muchos se arrepentirán de no haber aprovechado esos años.

Nos pasamos los cuatro años de carrera queriendo obtener el título y que llegue el día de la graduación, el viaje de fin de curso pero...,¿y ahora qué? ¿Qué sucede cuando terminas? Te mostramos algunos puntos con los que te sentirás identificado si estás buscando trabajo.

Los requisitos de las ofertas de trabajo suelen ser siempre las mismas: para trabajar aquí necesitas…

1. Tres años de experiencia.

Sí, has leído bien. Acabas de terminar tu carrera, sales a la calle y, ¿con qué te encuentras? Te piden un mínimo de 2 o 3 años de experiencia demostrable en el sector. Pero... A ver, ¿cómo voy a tener experiencia si durante estos años estuve (ejem) estudiando?

2. Certificado de idiomas.

El más común: el inglés. Pero he leído ofertas de búlgaro, francés e incluso ruso. Generalmente el certificado oscila entre un B2 y un C1 (First y Advanced). ¿Problema? En bachiller seguíamos estudiando el verbo To be… Y a ver quién es el listo que en la universidad dedicó horas extra a cultivar los idiomas.

3. Carnet de conducir.

Esto es como las lentejas: o las tomas o las dejas. Hay a quién le encanta y se ha sacado el permiso de conducir al cumplir la mayoría de edad y, hay quién lo ha ido dejando para “el próximo verano”. Seamos sinceros, lo que menos apetece en verano es ir a la playa con el libro teórico y estudiar las luces mirando al mar.

4. Conocimientos extra.

Aquí es dónde tienes que demostrar que todo lo que has estudiado durante esos cuatro años de universidad lo sabes poner en práctica. En el currículum mencionamos hasta “conocimientos de Word”. Sí, así es.

Quizá no hemos hecho mucho caso cuando nos explicaban algún programa informático nuevo en clase pero nosotros siempre ponemos que tenemos “nivel alto de…”. Las etiquetas que piden los captadores de empleados son variados y amplios. Así que, amigos, sólo podemos apuntarnos a cursos para perfeccionar estas habilidades.

5. Ser estudiante.

Hay una oferta que te encanta. Cumples todos los requisitos anteriores. Te preseleccionan, te llaman para una entrevista y, de repente te dicen: “Una última cosita…¿sigues estudiando, no? Necesitamos hacer convenio con la universidad”.

Os lo creáis o no esto sucede en el 90% de las ofertas. Muchos son los que se apuntan a másters online y cursos de universidades para poder realizar el convenio y obtener el puesto. Eso sí,no esperes un gran sueldo.

[Colaboración: Paula Martíns]

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